Mientras escribo éstas líneas esta nevando como no lo ha hecho en todo éste invierno. Es una sensación cálida y agradable la que estoy experimentando, sobre todo porqué estoy hecho trizas después la carrera de 20km de esquí de fondo (modalidad patinador) que hemos tenido esta mañana aquí en las afueras del pueblo. Hoy era una prueba importante, en parte porqué era la última de las series del pueblo (de 5) y yo tenía que defender mi título de campeón. También es una prueba que sirve de "termómetro" para ver como uno se siente de cara al Alley Loop, la maratón de 42km que dentro de dos semanas se celebra aquí en el pueblo la cuál es toda una fiesta nórdica y sin duda la prueba mas importante de todo el invierno.
Mis primeras sensaciones en la carrera de hoy han sido buenas. Hemos empezado con un buen desnivel solo empezar y eso a mí me va. Allí estaba metido entre Brian Smith, un animal polivalente que gana toda carrera que entra, Jon Brown otro mito atlético de las Rocosas, Duncan Callahan, el entrenador del equipo juvenil (y ganador de la Leadville 100) y como no, mi omnipresente némesis, la dos veces olímpica y campeona nacional Rebecca Dussault. Hacia el final del primer bucle, en un tramo de subida sostenida pero de poco desnivel, he puesto el motor y me he adelantado a Duncan y Jon, intentando pillar a Rebecca y no perder de vista a Brian, que ya iba escapado como una liebre bien por delante de todos. En la bajada de Paradise Park, que es tobogán con curvas la mar de divertido, Jon se rezagó algo y yo todavía intentaba seguirle la "rueda" a Rebecca con Dunca respirando en el cogote. En la segunda mitad empezó a nevar de verdad y todo mi gozo se fue al pozo. Túve que aflojar un poco de ritmo porqué sin darme cuenta me había pasado de rosca. En eso que Duncan y después Jon me pasaron y se fueron a la persecución de Rebecca (y de Brian) y y me quedé intentando no perder el pellejo en los llanos y mirando para atrás por si el pelotón no estuviese lejos (que por suerte lo estaba). Al cabo de un rato y a falta de unos 3km para meta me compuse de nuevo y logré meter tierra de por medio a Rebecca, que había sido pasada por los muchachos. Al final entré a meta en 59 minutos y 4s, Rebecca a 40" por delante, Duncan y Jon a unos 2 minutos y Brian, bueno de Brian ya ni hablo. Es uno de los mejores esquiadores del país.
Pero lo importante es que he logrado defender mi título de campeón de Crested Butte (porqué he corrido una carrera mas que Brian) de lo cuál me siento bastante orgulloso porqué a todo el cuarteto que tengo por delante les llevo de 15 a 20 años de ventaja.
Ahora a ver que pasa en el Alley Loop, una carrera mucho mas competida y larga en la que mi meta será estar entre los primeros cincuentones. Ya os contaré.
Esto es la rehóstia... está nevando tanto que tengo que colgaros una foto patatera hecha ahora mismo desde la ventana:
Xavi Fané
Mis primeras sensaciones en la carrera de hoy han sido buenas. Hemos empezado con un buen desnivel solo empezar y eso a mí me va. Allí estaba metido entre Brian Smith, un animal polivalente que gana toda carrera que entra, Jon Brown otro mito atlético de las Rocosas, Duncan Callahan, el entrenador del equipo juvenil (y ganador de la Leadville 100) y como no, mi omnipresente némesis, la dos veces olímpica y campeona nacional Rebecca Dussault. Hacia el final del primer bucle, en un tramo de subida sostenida pero de poco desnivel, he puesto el motor y me he adelantado a Duncan y Jon, intentando pillar a Rebecca y no perder de vista a Brian, que ya iba escapado como una liebre bien por delante de todos. En la bajada de Paradise Park, que es tobogán con curvas la mar de divertido, Jon se rezagó algo y yo todavía intentaba seguirle la "rueda" a Rebecca con Dunca respirando en el cogote. En la segunda mitad empezó a nevar de verdad y todo mi gozo se fue al pozo. Túve que aflojar un poco de ritmo porqué sin darme cuenta me había pasado de rosca. En eso que Duncan y después Jon me pasaron y se fueron a la persecución de Rebecca (y de Brian) y y me quedé intentando no perder el pellejo en los llanos y mirando para atrás por si el pelotón no estuviese lejos (que por suerte lo estaba). Al cabo de un rato y a falta de unos 3km para meta me compuse de nuevo y logré meter tierra de por medio a Rebecca, que había sido pasada por los muchachos. Al final entré a meta en 59 minutos y 4s, Rebecca a 40" por delante, Duncan y Jon a unos 2 minutos y Brian, bueno de Brian ya ni hablo. Es uno de los mejores esquiadores del país.
Pero lo importante es que he logrado defender mi título de campeón de Crested Butte (porqué he corrido una carrera mas que Brian) de lo cuál me siento bastante orgulloso porqué a todo el cuarteto que tengo por delante les llevo de 15 a 20 años de ventaja.
Ahora a ver que pasa en el Alley Loop, una carrera mucho mas competida y larga en la que mi meta será estar entre los primeros cincuentones. Ya os contaré.
Esto es la rehóstia... está nevando tanto que tengo que colgaros una foto patatera hecha ahora mismo desde la ventana:
Xavi Fané